Si hay un aspecto que marque indisolublemente la razón de ser y la esencia de Cantabria ese es, sin duda alguna, el mar pues entorno a él no sólo existen un sinfín de tradiciones sino que también él es la fuente de riqueza económica para muchas familias.
De ahí que en la ciudad de Santander exista lo que se conoce con el nombre de Museo Marítimo del Cantábrico. Un centro cultural este donde se intenta ensalzar, mostrar y valorar el patrimonio marítimo del lugar.
En él se puede disfrutar de unos fondos, de los más importantes que existen en España en este sentido, gracias a los cuales se muestra a los visitantes tanto la historia de la relación del hombre cántabro con el mencionado mar como la riqueza en cuanto a biodiversidad que existe en la zona.
En el siglo XIX es donde podemos encontrar el primer antecedente de este museo que nos ocupa que se caracteriza por dividirse básicamente en cuatro secciones que son las que le dan sentido: la vida en el mar, el Cantábrico y el mar en la historia, pescadores y pesquerías, y la vanguardia tecnológica frente al mar.