Cantabria es una región maravillosa por multitud de atractivos pero especialmente por uno: sus enclaves naturales. Por tal motivo, y para disfrutar de estos de una manera diferente, una recomendación a tener muy en cuenta es montarse en el Teleférico de Fuente Dé, que se halla enclavado en la localidad de Liébana.
Y es que desde este singular medio de transporte el visitante tendrá la oportunidad de dejarse maravillar por la espectacularidad que posee el Parque Nacional de los Picos de Europa. En concreto, disfrutará de los macizos calizos de dicho entorno mediante el recorrido que puede realizar con el citado teleférico.
Una altura que supera los 1.800 metros es la que alcanza aquel ofreciendo así al viajero unas vistas vertiginosas a la par que impresionantes que le dejarán con la boca abierta. En tan sólo cuatro minutos subirá desde el punto de partida hasta el mirador de Áliva donde podrá seguir contemplando un paisaje que, sin lugar a dudas, permanecerá en su retina para siempre porque la belleza del lugar es incomparable.
Entre las recomendaciones que se realizan a la hora de apostar por montarse en este Teleférico de Fuente Dé se encuentra una muy importante: lo mejor es hacerlo a primeras horas de la mañana.
Esto es así por dos razones fundamentales: primero, porque la climatología es frecuente que conforme avance el día vaya empeorando y la niebla puede impedir ver estos paisajes y segundo, porque muchas son las ocasiones en las que se forman colas muy largas para montarse en aquel.